Baya de Enebro
Derivado de un árbol de coníferas, el aceite esencial de bayas de enebro tiene un historial rico en usos y beneficios tradicionales. Su aroma amaderado, especiado y fresco tiene un efecto calmante y estabilizante. El aceite de bayas de Enebro va bien con salsas y postres de inspiración francesa y dará un impulso inesperado de sabor a una variedad de comidas. La baya de enebro también actúa como un tónico natural para la piel y reduce la aparición de manchas en la piel.
Mirra
Si el incienso es el "rey de los aceites", la mirra forma parte de la corte real. Su uso para mejorar el aspecto de la piel la convierte en un ingrediente clave de doTERRA Salubelle y de muchos otros productos para el cuidado de la piel. Utilizada históricamente en la meditación y el embalsamamiento, la mirra sigue siendo un aceite valioso e importante en cualquier colección de aceites esenciales.
Arborvitae
Conocido como el «árbol de la vida», el árbol arborvitae proporciona un aceite esencial versátil. Cálido y amaderado, el aceite esencial de arborvitae se utiliza en las prácticas de meditación por sus propiedades calmantes y su capacidad para dar una sensación de paz. El arborvitae también es un poderoso agente limpiador y purificante que ayuda de forma natural con el cuidado de la piel, y añade un aroma refrescante a la casa.
Tomillo
En la Edad Media, el tomillo se daba a los caballeros y guerreros antes de un combate porque se pensaba que daba valor a su portador. Los antiguos griegos utilizaban el tomillo en sus baños y lo quemaban como incienso en sus templos, mientras que los egipcios lo utilizaban en las ceremonias tradicionales. Hoy en día, el tomillo es conocido por ser una hierba popular en la cocina y se puede encontrar en los hogares de todo el mundo. Añade el aceite esencial de tomillo a los platos marinados de carne y a los platos principales para obtener un sabor fresco y herbáceo.
Tópico: Solo para uso tópico. Aplicar sobre la piel para perfumarla, cuidarla o masajearla.
Posible sensibilidad de la piel. Mantener fuera del alcance de los niños. Si estás embarazada, en periodo de lactancia o bajo supervisión médica, consulta con tu profesional de la salud. Evitar el contacto con los ojos, el oído interno y las áreas sensibles.